Auschwitz

lunes, 18 de agosto de 2008


No fue una visita agradable pero quizá si la que más me ha enseñado y por supuesto la más impactante. No entraba en mis planes ir a l campo de concentración igual que he evitado ir al de Dachau o al de Sachsenhausen estando cerca, pero para el resto de acompañantes la visita era obligada. Al final no me arrepentí aunque salí horrorizada.

Desde Cracovia hay un servicio de autobuses con guía que te ofrecen una visita guiada por Auschwitz y otros que también incluyen Auschwitz II-Birkenau. Otra opción, que fue la que elegimos nosotros, es la de aceptar la propuesta de una de las muchas personas que se te acrcan en la estación de autobuses ofreciéndose a llevarte en su coche a los dos campos por un precio bastante mejor, y con el horario que tu decides. Hay que regatear un poco y supongo que algún "chofer" será mejor que otro pero nosotros tuvimos bastante suerte .

Recuerdo que nos dijo que se llamaba Bob o algo que sonaba parecido, rondaría los cincuenta y tantos largos y tenía una ranchera blanca, viejísima y destartalada donde nos subimos cinco personas. A lo largo del recorrido de 70 km hacia el oeste de Cracovia, nos fue explicando cosas acerca de la vida en Auschwitz durante el Holocausto y nos dejó un libro que luego he estado buscando aquí y me ha sido imposible de encontrar. Nos contó que en invierno no es raro llegar a los 20 grados bajo cero en esa zona y nos pudimos imaginar la muerte de tantas personas semidesnudas, hambrientas, reventadas como animales por los trabajos a los que los sometían, vagando como fantasmas entre los barracones del campo. Ya antes de llegar a Auschwitz estaba empezando a ponerme mala.

Llegamos al campo y nos topamos con la puerta de entrada y esa frase famosa y horrible, esa burla despiadada lanzada desde arriba a todos los que pasaban bajo del arco que adornaba. "Arbeit Macht Frei"- El trabajo hace libres.

No se si esque yo ya iba predispuesta pero algo te encogía el corazón al entrar allí. Recordaba libros, escenas de películas que había visto sobre el Holocausto, pero era el estar allí y verlo con mis propios ojos lo que me dió conciencia de que realmente esas cosas pasaron, de que aquello existía y de que ningún libro ni ninguna película podría jamás contarnos la monstruosidad y el terror que se vivió allí ¿Cuantas personas pisaron aquel suelo durante los cinco años que duró la II Guerra Mundial? ¿Cuantas murieron justo donde yo estaba? Personas con familia, hijos, hermanos, padres. Que alguna vez pensaron en un futuro y en el de sus hijos, en tener una casa y se imaginaron siendo ancianos con sus nietos antes de que estallara la locura nazi.

Nada más entrar nos pasaron un video a peticion de Bob explicando la historia de Auschwitz con imágenes reales que ya había visto en la serie "Holocausto". Así, una vez realizado este recorrido audiovisual, tienes el cuerpo preparado para la visita.

De los tres campos de concentración que se crearon en la zona (El primero en Oswiecim, el segundo en Brzezinka y por último KL Auschwitz III en Monowice), sólamente KL Auschwitz I y KL Auschwitz II-Birkenau se conservan como museo.

Empezamos con Auschwitz I. Creado en 1940 fue el mayor campo de concentración nazi. En un principio estuvo pensado para paliar la situación en que se encontraban las cárceles de Silesia atestadas de prisioneros, pero pronto se convirtió en un campo internacional al que los nazis fueron llevando personas de todas partes de Europa sobre todo judíos, prisioneros de guerra soviéticos y gitanos, condenados por el nazismo al aislamiento y a una muerte lenta; bien por hambre, por el durísimo trabajo y experimentos a los que eran sometidos; o a la muerte inmediata a través de ejecuciones masivas. Estaba compuesto por 28 edificios de dos plantas, parte de ellos construidos con el esfuerzo de los presos y en los que llegaron a hacinarse hasta 20.000 personas. En estos bloques es donde está instalada la exposición que cuenta la historia del KL Auschwitz.

A partir de 1942 es cuando este campo se convierte en el mayor centro de exterminio de judíos europeos. La mayoría moría en las cámaras de gas nada mas llegar al KL Auschwitz y ni siquiera fueron inscritos en el registro del campo, por lo que es muy difícil determinar el número exacto de personas que murieron allí. Se habla de cerca de dos millones de víctimas.

En la sala primera del Bloque 4 se expone una urna con cenizas que recuerdan a todas estas personas que perdieron la vida en Auschwitz.

En la sala dos de este bloque se pueden ver documentos como los libros de registro de prisioneros y el registro de defunciones donde según nos decían hay que prestar atención a las columnas en las que se anotaron las causas ficticias de defunción y la hora. Se puede ver que las muertes se producían en intervalos de 5 a 10 minutos.

Y así pudimos ver hasta 20 salas en las que se exponían fotografías, documentos personales de los presos, instrumentos que utilizó Mengele en sus experimentos y anotaciones y libros en los que se recogen los informes de esos experimentos. Fotos de los prisioneros, con la fecha de entrada al campo y su fecha de defunción. Muchos no duraban una semana.

Otra sala contenía cientos de latas de Zyklon B. En Auschwitz se gastaron 20.000 kilos de gas Zyklon y según comentarios de Höss, solo se necesitaban de 5 a 7 kilos de este gas para matar unas 2000 personas. Tambien vemos los documentos de órdenes de pedidos y de transporte de camiones con cargamento de Zyklon. También en esta sala hay una reproducción a escala de una cámara de Gas y del crematorio.

Una de las salas que peor me puso es en la que se exponen toneladas de tela de crin de cabellos humanos, que los nazis obtenían de los que morían en el campo. Prueba de ello son los documentos de los análisis realizados enlso que se detecto una fuerte presencia de cianuro en als telas, producto principal del Zyklon B. y al otro lado se veían los efectos peronales, como maletas, gafas, zapatos, coches de bebés.. pertenencias de quienes subían engañados al tren que los llevaba a Auschwitz, convencidos de que las SS trataban de reubicarlos en los territorios del Este. Los nazis les vendían parcelas inexistentes para edificación de viviendas, granjas o comercios y le sofrecían puestos de trabajo en empresas igualmente inexistentes.

Tambien vimos el pabellón de la muerte, el bloque 11, con su paredón de ejecuciones

Alambrada y bloques en KL Auschwitz I

Y por último los sótanos con las celdas de tortura, el crematorio y la cámara de gas donde ya no se si era paranoia mía pero me parecía que tenía un olor desagradable. Justo delante del crematorio se encuentra el patíbulo donde fue ahorcado el primer comandante del campo Rudolf Höss.

Despues de esta desagradable visita, pensé que ya habíamos terminado con el museo de los horrores pero me equivoqué. Bob nos esperaba a la salida para llevarnos a Brzezinka, a tres kiómetros de KL Auschwitz I y que pudiesemos visitar el KL Auschwitz II-Birkenau donde en agosto de 1944 el total de prisioneros llegaba a los 100.000.

Fue en Birkenau donde los nazis construyeron la mayoría de las instalaciones de exterminio: cuatro crematorios con cámaras de gas, dos cámaras de gas provisionales y fosas y piras para la incineración.

En la torrre del centinela puedes ver una panorámica del campo y escuchar una grabación sobre el campo. Frente a esta torre se encuentra la plataforma de descarga donde llegaban los trenes con los prisioneros.


La entrada y las vías que todos hemos visto en las películas pertenecen al campo de Birkenau

En este campo se pueden visitar las barracas que habitaban los prisioneros porque se conservan en estado original. A la izquierda de la plataforma de descarga estan las barracas de ladrillo y a la derecha las de madera. Estas últimas estaban destinadas en principio a albergar unos 52 caballos pero despues de hacer unas mínimas reformas instalaron allí hasta mil presos.

Al final de la plataforma de descarga están las ruinas de los crematorios y de las cámaras de gas que las SS hicieron estallar para borrar las huellas.

Entre las ruinas de los crematorios se erige un monumento a las víctimas del Nazismo en Auschwitz que se inauguró en 1967.

Como veis no hice muchas fotos, aparte de las que he colgado en el post hay cinco o seis mas pero en las que salimos nosotros. Se te quitan las ganas hasta de usar la cámara.



Cracovia

domingo, 17 de agosto de 2008


Centro cultural, capital del voivodato de Pequeña Polonia (una de las 16 provincias que componen la república de Polonia) y antigua capital del país, esta ciudad a orillas del Vístula es una de las más visitadas por los turistas que eligen Polonia como destino para sus vacaciones. Al contrario que ocurrió con Varsovia durante la II Guerra mundial, Cracovia no sufrió apenas daños y ha permanecido con su arquitectura intacta hasta nuestros días.

Nosotros llegamos a Cracovia desde Berlín en un tren nocturno que tardaba 10 horas desde la Hautbanhof. El tren más antiguo que he pisado en mi vida y en que los robos a los pasajeros están a la orden del día ,así que si ese es tu medio de transporte elegido y quieres echarte a dormir, ponte la mochila como almohada y debajo de la ropa todo lo que tengas de valor. De esta forma nunca sufrí percances en el tren, pero en uno de los viajes que hice de esta manera a Polonia a una compañera de viaje poco precavida le hicieron una gran faena dejándola no solo sin dinero, sino lo que es peor, sin pasaporte en un país en el que lo único que se habla es polaco y donde necesitarás los servicios de un intérprete en inglés para poner la correspondiente denuncia en la comisaría de policía y que te arreglen en tu embajada en Varsovia un visado en polaco que la policía Alemana en la frontera de vuelta no tendrá ningunas ganas de aceptar si no eres lo suficientemente persuasivo. Además no cuentes con la ayuda del revisor del tren que a pesar de entender alemán o inglés te dirá que no entiende nada por evitarse complicaciones.

Dicho esto, y para no quitar las ganas ni sembrar el pánico entre aquellos que tenían pensado visitar la ciudad, tengo que aclarar que el resto de los polacos son gente muy simpática y amable y dispuesta a ayudarte por la calle siempre que lo necesites, que polonia o al menos lo que he visto de este país es precioso y que merece la pena ir. Lo demás es una mezcla de mala suerte y poca precaución.

Creo que el verano es la mejor época para visitar Cracovia, sobretodo en Junio, més en el que podremos ver en la Plaza Mayor a Lajkonik, un personaje que evoca la invasión Tártara. Nunca he ido en invierno pero dicen que sus belenes son dignos de admirar aunque advierto que una vez fui en Abril y hacía un frío insoportable. Eso sí, no os recomiendo ir en Semana Santa a no ser que seáis devotísimos. Polonia es un país muy católico y con un fuerte sentimiento religioso. en Semana Santa se paraliza todo y la ciudad es invadida por cientos de procesiones.

Una de las cosas que me llamó la atención en cuanto me bajé del tren fue que en cuanto te ven llegar, se te acercan personas con álbumes de fotos de sus casas convertidas en hostales para convencerte de que te alojes allí. La primera vez que fui probé esa modalidad y salió bien, cinco euros la noche, habitaciones y camas limpias y un baño compartido con otras dos habitaciónes. Teniendo en cuenta que ocupamos dos de las tres que tenía el piso, no estaba mal. La segunda vez elegimos albergue cerca de la estación de trenes.

Cracovia es facil de visitar en poco tiempo porque casi todo se concentra en el barrio antiguo llamado Stare Miasto y el barrio judío de Kazimierz. Para empezar con el casco antiguo seguiríamos la Vía Regia o antiguo camino real que seguían los monarcas para llegar al Castillo y partiríamos de la Barbakan o antigua puerta de la ciudad rodeada de un foso con los restos de las viejas murallas de Cracovia.


Barbakan

Dicen que antiguamente la barbakan conectaba con la Brama (puerta) Florianska a través de un pasadizo subterráneo aunque ahora se ha convertido en un salón de eventos culturales. Cruzando la puerta de Florián llegamos a la Ulika Florianska que es la calle principal de Cracovia, llena de tiendas, bares y restaurantes y que nos conduce directamente a la Plaza Mayor.

Ulika FLorianska

En esta plaza medieval se concentran los edificios del Mercado (antigua lonja de paños), el museo de Cracovia, la Torre del Ayuntamiento y la Iglesia de Santa María.

El mercado es un edificio imponente. En la planta baja encontrarás un enorme mercadillo de artesanía y en la planta de arriba podrás disfrutar de la galería de pintura polaca.

Mercado de Paños

Casi en frente del mercado está la iglesia de Santa María de estilo gótico. De gran importancia artística son las pinturas que decoran la iglesia y su altar medieval. Yo no estoy muy puesta en arte y lo único que puedo decir es que me impresionó pero quien tenga más conocimiento sobre estas cosas valorará sin duda mejor la belleza de ese altar ya que por lo visto es único.

Una cosa curiosa que tiene esta iglesia es que a cada hora en punto, una trompeta suena desde las torres. Se dice que este toque de trompeta suena en recuerdo del trompetero que hacía sonar la trompeta avisando de las incursiones del ejército tártaro en Cracovia durante el siglo XIII y que fue abatido por los tártaros con una flecha mientras avisaba y no pudo completar el toque.

Iglesia de Santa María

La torre del ayuntamiento alberga el museo histórico de Cracovia y se puede subir a disfrutar una preciosas vistas de la ciudad. En los sótanos todavía se conservan intactas las antiguas salas de tortura convertidas en bares.

Siguiendo por la antigua Vía Regia atraviesamos la Plaza Mayor y tomamos la Ulica Grodzka para llegar hasta el castillo de Wawel. En esta calle hay varias iglesias y edificios históricos como el de la escuela de leyes, fundada en el siglo XV.

Al final llegamos a la colina de Wawel uno de los conjuntos arquitectónicos más valiosos del mundo coronada por su castillo, antigua residencia de los reyes polacos, y la catedral. Tanto la catedral como el castillo datan del siglo XI, pueden visitarse con un límite diario de visitantes y es curiosa la cueva del dragón, un pasadizo abierto en la roca en el que se creía que habitaba el dragón de Cracovia y que parte de él está abierto al público. El castillo de Wawel alberga las colecciones de arte estatal y el tesoro de la corona.


Dragón de Cracovia

Contigua al castillo encontramos la catedral, un edificio precioso del siglo XI y panteón de muchos reyes polacos. Cuenta con 20 capillas y fue lugar de coronaciones y entierros de reyes hasta que la capital de Polonia se trasladó a Varsovia. Cada capilla tiene su motivo para visitarla, las tumbas de reyes, reinas, los tapices que las adornan... Es junto con el castillo uno de los monumentos de Cracovia que es imposible perderse.


Catedral

Con esto tendríamos visto el centro histórico de la ciudad y nos dirigiremos al barrio de Kazimierz bajando por una escalera situada a la derecha de la puerta de acceso de Wawel, cogemos la calle Dietla hasta la calle Stanislawa y llegamos a una plaza donde se alza la basílica de San Miguel y el convento de los paulistas que todavía conserva restos de las antiguas murallas de la ciudad. Salimos de la plaza por la calle Skateczna hasta la la calle Augustianska, torcemos a mano derecha y cogemos la calle Wegtowa hasta la plaza Wolnica y ya estamos dentro de Kazimierz, delante de su ayuntamiento del siglo XV en el que podremos visitar el museo Etnográfico de Cracovia.

Kazimierz era una antigua ciudad cerca de Cracovia que más tarde se convirtió en el barrio judío de la ciudad y fue habitado por estos hasta 1939. Casi todo lo que hay que ver en Kazimierz se encuentra en la calle Szeroka y sus alrededores. A parte de sus casas y la decoración, sus sinagogas y lo bonito del barrio, destacaría un par de lugares de interés:

La Sinagoga Vieja: Concentraba toda la vida social y religiosa de la comunidad judía del barrio hasta la llegada del Holocausto. Ahora es parte del museo histórico de la ciudad.

La Sinagoga y el Cementerio Remu: La sinagoga fue construida en el siglo XVI y todavía sirve como lugar de culto. El cementerio Remu es el más antiguo de cracovia y da un poco de impresión la cantidad de lápidas góticas que encontramos.

En cuanto a la comida en Cracovia es bastante barato comer muy bien. Para los que vayan con presupuesto reducido recomiendo los "bares de leche", herencia del antiguo comunismo. Uno muy bueno es el Pod Filarkami que hace esquina con la calle Dietla, cerca de la colina de Wawel.

Pero si lo que quereis es pegaros la comida de vuestra vida os recomiendo el Ogniem i Mieczem, un restaurante en el que podréis probar la comida típica polaca rodeados del ambiente del siglo XVII. Está un poco alejado del centro, justo en la orilla opuesta del Vístula en la plaza Serkowskiego.

El plato típico es el "Bigos", un plato contundente a base de carne, col, cebolal y ciruelas y las pierogi o empanadillas que pueden estar rellenas de cualquier cosa, dese carne, requeson, patatas, verduras...etc

La cerveza polaca es también muy buena, sobre todo la Okozim y su
vodzcka muy famoso, yo no soy muy aficionada al wodzka y aunque lo probé no sabría decir si es mejor o peor que otros pero hubo quien lo disfrutó bastante.

Y para despedir este post os dejo una muestra de los platos del
Ogniem i Mieczem.





Fotos:Marta

Munich

viernes, 15 de agosto de 2008

Fundada en 1158, es la tercera ciudad más grande de Alemania y la capital del estado de Baviera. Munich está situada en un entorno privilegiado, rodeada de montañas y muy cerca de los Alpes bávaros.

Desde el aeropuerto se llega fácilmente a la ciudad con las líneas del S-Bahn (trenes de cercanías) S1 y S8 hasta la Hauptbanhof (o estación central) desde donde salen la mayoría de las líneas de metro, tranvía y autobuses que te llevarán a donde tu quieras. Hay dos fechas que recomendaría para viajar a Münich. Una es por supuesto a finales de septiembre - principios de octubre, coincidiendo con la Oktöberfest, la fiesta de la cerveza más grande del mundo que tiene lugar en el parque de Theresienwiese y a la que acude gente procedente de todas partes del planeta. Eso sí, tienes que conseguir sentarte en una mesa de las carpas que las fábricas de cerveza habilitan como representación de cada una, para que te sirvan una gigantesca jarra de litro (más pequeñas no sirven). El ambiente es estupendo y te demuestra que los alemanes, lejos de los tópicos, pueden ser gente muy simpática y con muchas ganas de pasárselo bien.

Otra fecha es la que va desde mediados de Junio a mediados de Julio, coincidiendo con el Festival de Tollwood que tiene lugar en el Olympia Park y durante el cual todos los días hay conciertos de grupos internacionales, teatro y actividades multiculturales además del mercadillo con estands de países de todas partes del mundo. En esta época la temperatura es muy agradable aunque hay que tener cuidado con las tormentas de verano que son frecuentes y pueden dejar caer un diluvio entero en menos de diez minutos.

La Navidad también es bonita, claro que hay que aprovechar el día para ver cosas porque en esa época el sol empieza a aparecer sobre las cinco de la mañana y a las cuatro de la tarde ya es de noche. Hace muchísimo frío pero las calles y los escaparates llaman la atención por su decoración y también los mercadillos navideños. Además si te tomas un buen tazón de Gluwine se te quitará el frío antes de que te des cuenta.

El Gluwine es una bebida caliente a base de vino y frutas y con sabor a canela que está buenísima. Me recordó a una especie de sangría caliente con canela y unos cuantos grados más de alcohol. La suelen vender en los puestos del mercadillo y en cualquiera de los muchos "kioscos" donde puedes comprarte unas salchichas, kebabs, frikadelles... para ir comiendo por la calle y que están presentes por todas las calles alemanas.

Y si vas a Münich que menos que tomarte una cerveza. Los mejores lugares para esto son los Biergarten o jardines de cerveza. El más famoso es el de la cervecería Hofbräuhaus, con una capacidad enorme y que se ha convertido en un símbolo para el que quiera degustar una de las mejores cervezas de Alemania. Por cierto que su carpa es también la más popular de la Oktöberfest. Otro de mis biergarten preferidos es el de la Chinesischer Turm en el Englische Garten (o jardín Inglés), un parque precioso con un biergarten al aire libre donde puedes tomarte una cerveza en cualquiera de sus largas mesas de madera mientras almuerzas.

Chinesischer Turm

La comida en Munich me gustó. Un lugar barato y típico para comer son los Gaststätten donde se sirve cerveza y comida a un precio muy asequible. Y como recomendar recomendaría el Atzinger en Schelling Strasse por sus precios ya que es el preferido de los estudiantes y el Fraunhofer en la Fraunhofer Strasse donde los platos son estupendos. Son típicas de baviera las Weisswurst o salchichas blancas, hechas a base de carne de ternera y especias y suelen comerse siempre antes de las doce de la mañana (Los muniqueses dicen que estas salchichas nunca deben oir las campanadas de las doce). Me gustaron tanto que 12 meses después no quería ni verlas...que empacho.

Se comen acompañadas de un Brezn que es como una rosquilla de pan con sal y que también suele acompañar las jarras de cerveza y al LeberKäse.

Brezn



El Leberkäse es otra comida típica de baviera, una especie de embutido que aunque su nombre podría confundirnos (traducido literalmente sería queso de hígado) no lleva nada de hígado ni queso sino una mezcla de carne de cerdo y vaca, cebolla y especias.

Tambien es típica la LeberKnödel que son unas albóndigas grandes de hígado de ternera, pan y perejil. y el Spätzle que a mí me encantaba con queso y era uno de mis platos preferidos. Si queréis saber como se cocina he encontrado esto en la wiki. Y sobre todo no hay que dejar de probar los asados de cerdo y buey. Como veis comida "ligerita" toda.

Como lugares de interés en Munich os dejo unos cuantos:

MarienPlatz: Es el centro de Munich con el ayuntamiento y su carrillón y la Frauenkirche que es la catedral de Munich, a pocos metros. Está comunicada con KarlPlatz a través de la calle peatonal de Neuhauserstrassen, llena de tiendas y establecimientos de ropa de diseño. Detrás de Marien Platz se encuentra el Virtuellen Market, un mercado de comida y flores donde te puedes sentar en el biergarten a tomarte una cerveza y comer.

OdeonPlatz: En esta plaza donde también se encuentra la Theatinerkirche, tuvo lugar la represión de la revuelta encabezada por Hitler y su detención tras el "Putsch de Múnich" o golpe de estado de noviembre de 1923. Los militares nazis que perdieron la vida en esa plaza fueron enterrados más tarde como héroes de guerra en el panteon de OdeonPlatz.

Englische Garten: El jardín Inglés es la zona verde más grande dentro de Munich, el pulmón de la ciudad y uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Está recorrido por el río Isar y allí puedes ir a pasar el día, comer en el biergarten de la Chinesischer Turm, pasear en bici o montarte en una de las barquitas del lago. Es un sitio precioso y el preferido para tomar el sol por los muniqueses en verano. Hay una zona nudista y otra para los menos atrevidos.

Zona de Schwabing: Es la zona mas selecta en cuanto a pubs y locales de noche se refiere. Las cafeterías de los alrededores están muy bien para hacer un alto por la tarde y tomarte un café con un apfelstrudel (o pastel de manzana).

Castillo de Nymphenburg: Para llegar una de las opciones es coger el tranvía 12 hasta Romanplatz o el autobús hasta la parada de Nymphenburg Schloss. Es uno de los castillos construidos durante el reinado del Rey Ludwig II de baviera o también conocido como el "Rey loco". Cada uno tiene sus preferencias pero más que el interior del castillo me gustó el jardín que hay detrás, los alrededores con sus pabellones y el edificio en si. En mi opinión respecto a los palacios como este, cuando has visto uno por dentro los has visto todos.

Olympiapark: Es el parque olímpico de la ciudad al que se llega con la línea U3 de metro hasta la estación de Olympiazentrum. Este parque y sus instalaciones acogen todo tipo de eventos culturales y conciertos, además de ser un sitio ideal donde practicar deporte y disfrutar de sus instalaciones deportivas que cuentan con piscina cubierta y el Olympia Stadium. Os dejo un enlace donde podéis ver el calendario de eventos aunque sólo está disponible en Alemán

una vista del Olympiapark con el Olympia Stadium


Para salir por la noche, la mayor parte de los locales se concentran en Künstparköst a donde se llega con el S-Bahn hasta la estación de Östbahnhof. En este lugar encontraras discotecas y bares para todos los gustos desde bares tranquilos, de salsa, country, hasta discotecas techno y bares y discotecas donde puedes escuchar rock y metal. De estas últimas recomiendo el Doom y el Titty Twister. Tambien en los alrededores de MarienPlatz y de Münchener Freiheit (U3 hasta Münchener Freiheit) puedes encontrar locales para tomarte unas copas por la noche.

En cuanto a museos, están las tres pinacotecas (Alte Pinakothek, la Neues Pinakothek y la Pinakothek Der Moderne) situadas una al lado de la otra en la Barer Strasse, y el Museo Alemán de Ciencias Naturales y Tecnología situado en la Museumsinsel o isla de los museos. Esta isla no se encuentra muy lejos andando de Marienplatz aunque puedes llegar con el S-Bahn hasta la parada de Isartor en la plaza de Isarplatz y estarás en cinco minutos.


Munich cuenta con una red de transporte enorme y puedes llegar en transporte público a todos los puntos de la ciudad. En esta pagina podéis obtener información en español sobre las tarifas, los horarios y los planos de los distintos medios de transporte público en Münich (Tram, U-Bahn, S-bahn y Bus).

Os dejo los enlaces para descargaros en pdf los planos de los medios de transporte:


Yo recomiendo que si vais varios días a Munich y queréis aprovechar y visitar algún pueblo cercano, utilicéis el Wochenende ticket
si os movéis en fin de semana(que te permite viajar por toda Alemania) o el Bayerische ticket si viajáis cualquier otro día (sólo válido para la zona de baviera, o por la región en la que os encontréis. Existe un ticket para cada región) .

jueves, 14 de agosto de 2008